Las obras de la extensión hospitalaria del Arnau de Vilanova en Llíria están paralizadas y la Conselleria deriva todos los costes y la responsabilidad de la conservación y seguridad de las obras ejecutadas a la concesionaria de la construcción.

Según constató el alcalde de Llíria a los grupos políticos del consistorio edetano, la Generalitat mantiene paralizadas las obras de construcción de la extensión hospitalaria de Llíria a consecuencia de un déficit en el proyecto constructivo y presupuestario. De hecho, se está preparando una modificación del proyecto que está alrededor de los 6 millones de euros.

Desde Compromís se han hecho una serie de preguntas parlamentarias donde la respuesta que ha dado el Consell constata una paralización temporal de la ejecución de las obras, así como que la Generalitat descarga toda la responsabilidad y el coste de mantenimiento de lo que ya está ejecutado en la empresa constructora Ocide Construcción S.A.

Según Paco García, concejal de Compromís en Llíria, estos atrasos supondrán un coste añadido que, seguro que no va a soportar la empresa adjudicataria y serán imputados de manera directa o indirecta a la administración autonómica, la cual ha sido incapaz en casi una década de llevar adelante la implantación de esta infraestructura sanitaria para las comarcas del Camp de Túria y Serranos.

El portavoz ecosocialista apunta que, este proyecto se licitó por 25 millones de euros, que al poco tiempo sufrió un sobrecoste del 20% (5 millones de euros más), situándose en un coste total de 30 millones. Ahora, 9 años después de su anuncio por el entonces Conseller de Sanitat, Serafin Castellano, el coste total se puede situar en los 36 millones de euros, con una segunda modificación del proyecto que, junto a la primera, supondrá un incremento cercano al 50% del precio de licitación.

Para García, el PP ha sepultado y derrochado los recursos públicos, dejando vacías las arcas públicas y a medias y por finalizar muchas instalaciones como la extensión hospitalaria de Llíria, hecho que demuestra una ineficaz y pésima gestión al frente de la Generalitat.
Desde Compromís se reclama la finalización de las obras y su puesta en funcionamiento, con una gestión directa y pública, sin injerencias de las empresas privadas de gestión y mucho menos que se haga una mala venta de lo que ya está construido y se ceda a intereses particulares su explotación.